En el marco de la Campaña Internacional "Declaremos Lima Antitaurina", AnimaNaturalis Perú envió hoy una carta al Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, Arzobispo de Lima y Primado del Perú, en la cual le solicita un pronto pronunciamiento público en relación al tema de las corridas de toros. La carta, con copia a la Nunciatura Apostólica, la Conferencia Episcopal Peruana, el Consejo Episcopal Latinoamericano y los medios de comunicación, recomienda a Monseñor Cipriani que "primen los principios evangélicos y del Magisterio en su apreciación, como corresponde a su alta investidura y a la consecuencia que debe existir entre estos y su relación práctica con cada evento social en el que interviene la Iglesia"
La carta
Lima, 14 de octubre de 2004
Su Eminencia
JUAN LUIS CIPRIANI THORNE
Arzobispo de Lima y Primado del Perú
Presente.-
Excelentísmo Señor Cardenal:
Por medio de la presente, lo saludo en nombre de nuestra organización y de todas las personas interesadas en la convivencia pacífica en nuestra sociedad en todos los niveles.
Escribimos para informarle que nuestra organización, con presencia en más de 10 países y 20 mil miembros, ha dado inicio en agosto a la Campaña Internacional "Declaremos Lima Antitaurina", a través de la cual se solicitará al Dr. Luis Castañeda Lossio que acoja el pedido de la mayoría de la población limeña, quienes, según encuesta de la Universidad de Lima de noviembre de 2003, está en un 63.2% en desacuerdo con las corridas de toros. La acción principal que estamos llevando a cabo es la recolección de 100 mil firmas, las cuales serán presentadas al Alcalde de Lima junto con la solicitud. A dos meses de iniciada nuestra campaña, hemos contabilizado ya alrededor de 45 mil firmas, sin incluir los cientos de planillones que aún no hemos recibido.
Esta iniciativa se basa en las campañas exitosas que han servido para que las autoridades ediles de Barcelona, Olot, Manlleu, Granollers y Molins de Rei declaren este año a sus respectivas ciudades como "Ciudad Antitaurina y Amiga de los Animales", decisión valiente y respetuosa de la democracia a pesar de las evidentes presiones.
Una de las preocupaciones manifestadas por la población es el respaldo que la Iglesia Católica brinda a este sangriento espectáculo. Nuestro país requiere de usted un pronunciamiento claro sobre el tema, ya que es de conocimiento general que la doctrina católica se caracteriza por enseñanzas de misericordia, compasión, amor y paz, cualidades de las que está desprovista esta tradición cruel de la que participan personas que se ensañan con una animal inocente y noble, torturándolo violentamente hasta conseguir su muerte. Son muchos los católicos y no católicos sensibles que muestran interés en estos temas y se sienten confundidos por la posición de la Iglesia Católica. Muchos de ellos no entienden cómo, por un lado, la Iglesia bendice en actos públicos a los animales y se ha considerado a estos protegidos incluso por un Santo Patrono, San Francisco de Asís, y, por otro, respalda su matanza por diversión en cosos taurinos.
A través de la historia, muchos teólogos y católicos eminentes han condenado esta fiesta sangrienta o el maltrato a los animales en general. Entre ellos tenemos a San Francisco de Asís, Tirso de Molina, San Juan de Ávila, Papa Sixto V, Tomás de Villanueva (Arzobispo de Valencia), Fray Francisco de Alcocer, Arzobispo Montuja, Fray Damián de Vegas, Jaime Balmes, Martín de Azpilcueta Navarro (canonista), Martín Sarmiento (teólogo), San Buenaventura, etc.
Incluso San Pío V firmó la Bula de Excomunión a Perpetuidad "DE SALUTIS GREGIS DOMINICI" (en 1567), que afirmaba, entre otras cosas, que: "considerando que esos espectáculos en que se corren toros y fieras en el circo o en la plaza pública no tienen nada que ver con la piedad y caridad cristiana, y queriendo abolir tales espectáculos cruentos y vergonzosos, propios no de hombres sino del demonio, y proveer a la salvación de las almas, en la medida de nuestras posibilidades con la ayuda de Dios, prohibimos terminantemente por esta nuestra Constitución, que estará vigente perpetuamente, bajo pena de excomunión y de anatema en que se incurrirá por el hecho mismo (ipso facto), que todos y cada uno de los príncipes cristianos, cualquiera que sea la dignidad de que estén revestidos, sea eclesiástica o civil, incluso imperial o real o de cualquier otra clase, cualquiera que sea el nombre con el que se los designe o cualquiera que sea su comunidad o estado, permitan la celebración de esos espectáculos en que se corren toros y otras fieras en sus provincias, ciudades, territorios, plazas fuertes, y lugares donde se lleven a cabo".
Estando a pocos días del inicio de la "Feria del Señor de los Milagros", esperamos su pronto y necesario pronunciamiento al respecto, confiando en que primen los principios evangélicos y del Magisterio en su apreciación, como corresponde a su alta investidura y a la consecuencia que debe existir entre estos y su relación práctica con cada evento social en el que interviene la Iglesia.
Sin otro particular, me despido.
En defensa de todos los animales,
JOSE ENRIQUE ESCARDÓ STECK
Secretario Regional para Sudamérica | AnimaNaturalis Internacional
Director Nacional | AnimaNaturalis Perú
c.c: Consejo Episcopal Latinoamericano
Nunciatura Apostólica del Perú
Oficina de Educación del Arzobispado de Lima
Conferencia Episcopal Peruana
Medios de Comunicación
¿Qué puede hacer usted?
Escriba al correo siguiente para que el Arzobispado de Lima sepa que está interesado en el pronunciamiento del Cardenal Cipriani a nombre de ls Iglesia Católica peruana: [email protected]
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