Quito. La Asamblea Nacional activa, otra vez, un problema social recurrente: el maltrato animal. La propuesta pretende reformar el Código Orgánico Integral Penal (COIP). Viviana Bonilla, primera vicepresidenta de la entidad es quien está a la cabeza del proyecto. La ruta trazada se enfoca en dos cosas: que estas agresiones pasen de contravenciones a delitos y endurecer las sanciones.
Los cambios quedarían así:
Ahora
En el Código vigente los artículos 249 y 250 dan tratamiento a la violencia contra animales.
- Maltrato o muerte: 50 a 100 horas de servicio comunitario.
- Incentivar peleas entre perros: 7 a 10 días de prisión.
- Si hay mutilación o muerte del animal: 15 a 30 días de prisión.
Propuesta
- Muerte de animal: 6 meses a 1 año de prisión.
- Abandono animal: de 20 a 50 horas de trabajo comunitario.
- Zoofilia: 6 meses a 1 año de cárcel.
- Incentivar peleas entre perros: 2 a 6 meses de cárcel.
Las fortalezas y debilidades de la reforma
Inti Alvarado es Coordinadora Jurídica de la fundación Rescate Animal Ecuador, conoce bien de este planteamiento y no se confía tanto de él. En su rol como activista y abogada ha hecho denuncias por esta problemática a la Fiscalía y en ningún caso ha ganado.
“No se empieza hacer ninguna investigación, no se recaban evidencias, no se aportan pruebas. Al Estado no le representa este tipo de individuo que ha sido violentado”. De allí que Inti destaque la intención de abordar el tema como delito.
Lo que sí considera oportuno es hablar también sobre prevención porque la “educación es la clave”. El argumento es sencillo: “Si los niños no ven a los animales como su prójimo, la lógica no va a cambiar”.
Igualmente la activista aplaude lo del trabajo comunitario como sanción, pero cree que está mal direccionado: “Se debe aplicar con las organizaciones en pro de los animales, porque sino van arreglar un bache, van a pintar un puente y no están resarciendo el daño al animal”.
A pesar de que aún no hay fecha para que el proyecto gestionado desde el legislativo empiece su trámite, Bonilla ya lo ha empezado a promocionar desde sus redes sociales.
Inti sabe que sucederá pronto y por esto es necesario ampliar el grupo de beneficiarios a quienes va dirigida la reforma, es decir, que no se quede solo en animales de compañía como lo son perros y gatos, sino que se dinamice hacia las demás especies.
¿Y qué pasó con la ley LOBA?
Entre 2014 y 2015 un grupo de activistas generaron también una propuesta a la que llamaron Ley Orgánica de Bienestar Animal (Loba). Aquellas ideas se acogieron en parte en el Código del Ambiente aprobado en 2016.
Entre sus artículos hay un apartado relacionado al manejo responsable de la fauna urbana y allí se hace una clasificación legal de los animales: compañía, trabajo u oficio, consumo, entretenimiento y experimentación.
Además, en el numeral 146 se detallan ocho actos prohibidos contra los animales y en esa enumeración el suministrar alimentos dañinos o sustancias tóxicas que puedan causar dolor o muerte”.
Por Catherine Yanez Lago para Extra.ec
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