Prohibida la caza en terrenos de 30 pueblos de Madrid

La Consejería de Medio Ambiente ha prohibido la caza de todas las especies cinegéticas en los terrenos libres de una treintena de municipios, con lo que se pretende que no se ocasionen daños ni a las especies de caza, ni al resto de la fauna ni a los ciudadanos.

21 octubre 2003
Internacional.
La Consejería de Medio Ambiente ha prohibido la caza de todas las especies cinegéticas en los terrenos libres de una treintena de municipios, con lo que se pretende que no se ocasionen daños ni a las especies de caza, ni al resto de la fauna ni a los ciudadanos.

Los terrenos en régimen de aprovechamiento cinegético común, también denominados terrenos libres, no están sometidos a ningún Plan de Gestión que garantice el aprovechamiento ordenado de sus recursos.

De ahí que cazar en ellos pueda suponer un riesgo tanto para la fauna como para los ciudadanos, pues, además del abuso que puedan cometer los cazadores, algunos de estos terrenos están muy próximos a núcleos urbanos.

La Orden 2200/2003, publicada el 3 de octubre, ha establecido la veda de todas las especies de caza, para esta temporada, en el "Cerro Robledillo", de Robledo de Chavela, Alcalá de Henares, Arroyomolinos, Brea del Tajo, Fresnedillas de la Oliva, Getafe, Leganés, Pelayos de la Presa, Sevilla la Nueva, Talamanca del Jarama, Valdemaqueda, Valdemoro y Zarzalejos.

Además de estos municipios, el viceconsejero de Medio Ambiente, Federico Sepúlveda, dijo a Efe que tampoco se puede cazar en "los municipios de todo el territorio del Parque del Guadarrama y del Parque del Sureste", tal y como señala la Orden 790/2003, que fija las limitaciones y épocas hábiles de caza.

Sólo en cotos con un plan técnico de gestión

El viceconsejero indicó que estas medidas las está llevando a cabo la consejería "desde hace unos años, bien por motivos medioambientales, bien porque los mismos ayuntamientos lo piden, pues lo que se pretende evitar es que se ocasionen perjuicios para la fauna; además de que lo deseable es que la caza se practique en cotos donde haya un plan técnico de gestión".

De hecho, esta nueva orden aclara que "cuando no hay un Plan de Gestión no se puede fijar el número de cazadores que pueden practicar la caza en los días hábiles, por lo que en el caso de que su número sea alto pueden producir una excesiva presión sobre las especies presentes en tales terrenos".

Esta medida pretende evitar, según el viceconsejero, situaciones como la que se vivió en octubre de 1998, cuando la Consejería de Medio Ambiente tuvo que intervenir en Villamanta debido a la gran cacería que se hizo en un terreno libre.

Escopetas sin control

El entonces director general de Medio Natural, José Javier Fernández Santamaría, recordó que "las escopetas de 200 cazadores abatieron durante el puente de El Pilar miles de ejemplares de conejos, perdices y liebres en un terreno libre, es decir: sin control ni límite para la caza".

Y como los cazadores se cobraron en un fin de semana las piezas de toda una temporada, Medio Ambiente impuso la veda hasta la siguiente.

Federico Sepúlveda aseguró que la Federación Madrileña de Caza está en la misma línea de la consejería de "evitar situaciones indeseables", por lo que "esta medida ha sido bien recibida".

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