Rescatan cincuenta gatos tras seis años encerrados

Estaban recluidos entre excrementos y se comían unos a otros hasta que fueron localizados por activistas proanimales.

23 enero 2006
España.

La señora María quería a los gatos. Los recogía de la calle pensando que así los salvaba de una muerte segura. Pero este amor irracional condenó a los felinos a seis años de encierro y hambre salvaje.

Recluídos en dos cuartos llenos de excrementos y un hedor insoportable, acostumbrados a alimentarse de la carne de sus congéneres para sobrevirir, y enfermos de sarna, tinia, parásitos y anemia. Así encontró la Federación de Asociaciones Protectoras y de Defensa Animal de la Comunidad de Madrid a los 50 animales que rescató en un pueblo de Guadalajara, a sólo cien kilómetros de la capital.

Los activistas que participaron en la liberación, el 5 y el 14 de enero, aseguran que nunca olvidarán lo que vieron allí: huesos y cadáveres en descomposición cubrían el suelo del gallinero oscuro en el que malvivían 15 gatos.  El hambre les hacía lanzarse desesperadamente hacia la verja del recinto cuando notaban alguna presencia.

Los otros 35 fueron hallados en una pequeña habitación en la que no entraba nadie a limpiar desde hace seis años. Los restos de esqueletos evidenciaban que era una práctica habitual alimentarse de los congéneres muertos y de los cachorros recién nacidos .

Salvajes e insociables

Además de las lógicas desnutrición y deshidratación, los animales padecían una falta de sociabilización que hará muy larga y difícil su recuperación. Las asociaciones protectoras estudian ahora denunciar a la propietaria con el fin de que la inhabiliten para tener mascotas.

Cárcel contra la crueldad

El artículo 337 del Código Penal castiga con penas de prisión de hasta un año a quienes maltraten o lesionen a mascotas. Por el mismo delito también prevé inhabilitar con hasta tres años para el ejercicio de actividades que tengan relación con los animales. Pese a ello, casos como el de los gatos de Guadalaja son frecuentes. En noviembre, 170 perros en lamentables condiciones fueron desalojados de un cercado repleto de escombros, chatarra y desperdicios en Portillo (Toledo).

Fuente: 20 Minutos

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