Tiene un peso promedio de 432 gramos y una cresta que lo hace muy famoso. Tiene el tamaño de una ardilla, su pecho y vientre son de color blancos y su cola está cubierta de un largo pelaje negro y marrón. Viven en zonas boscosas y se alimentan a través de la capa media del dosel en busca de las frutas y de los insectos que constituyen gran parte de su dieta, aunque también se sabe que comen vertebrados más grandes. Cumple una función importante en el ecosistema en el que habita, pues permite la difusión de semillas en todo el trópico. Además puede producir más de 38 vocalizaciones diferentes. Cuando se siente amenazado, levanta su pelaje blanco sobre su cabeza para parecer más grande.
Su población ha disminuido considerablemente, la deforestación y la actividad humana son las mayores amenazas para su supervivencia. Colombia está perdiendo su selva tropical a un ritmo alarmante por el desarrollo y la agricultura, de hecho, el país sudamericano ha registrado la cuarta mayor pérdida de selva tropical en el mundo. Parte de esta pérdida se atribuye a la ganadería y los cultivos que se utilizan para su alimento. Se estima que solo queda el 5 por ciento del rango geográfico original del mono tití. También se ven afectados por el tráfico ilegal para ser comercializados como mascotas. Actualmente, se encuentra en Peligro Crítico de extinción, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Es vital para esta especie, promover proyectos que permitan la pedagogía de su cuidado, pues su pérdida, también pondría en peligro los bosques tropicales.
El consumo de carne aporta a la destrucción de su hábitat, pues una de sus mayores amenazas es la ganadería extensiva. Tu estilo de vida puede aportar a la conservación de la especie, no promuevas la extinción, denuncia si conoces casos de tráfico ilegal de especies, no interactúes con la fauna silvestre.
¡En nuestras manos también está su cuidado y protección!
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