El gobierno da marcha atrás con los correbous

Según un artículo publicado en el Diari ARA, la regulación de los correbous es una de las patatas calientes del Gobierno. Después de que las entidades contrarias a las celebraciones taurinas criticaran el primer borrador de reglamento, Interior se lo replantea.

13 febrero 2012
Terres de l´Ebre, España.

El departamento de Interior de la Generalitat está elaborando un nuevo reglamento que desarrollará la ley de los correbous, aprobada en 2010 con el apoyo de CiU, PP, ERC y la mayoría de diputados del PSC. El Gobierno trabaja en una nueva propuesta, después de que trascendiera un primer borrador que preveía una ampliación de los supuestos en que se permitían celebrar estas controvertidas fiestas taurinas. Este borrador suscitó críticas de varias entidades contrarias a esta tradición, muy arraigada en las Tierras del Ebro. Fuentes del departamento de Interior explican que el nuevo borrador se consensuará tanto con partidos como con entidades, pero han declinado revelar su contenido o los aspectos que se modifican respecto a la primera propuesta. "Es un tema que despierta muchas sensibilidades y por eso no explicaremos la propuesta hasta que no esté totalmente definida", razonan las mismas fuentes.

El aspecto más cuestionado de este primer borrador, al cual ha tenido acceso el ARA, es la ampliación de los municipios que podrían obtener permisos para celebrar correbous con el argumento de la tradición. Si la ley del 2010 fijaba 34 municipios, 26 de los cuales están en las Tierras del Ebro -donde se consideraba que los correbous estaban bastante arraigados-, el borrador de reglamento abría la veda a cualquier municipio que acreditara haber celebrado con anterioridad a la publicación de la ley. Además, a pesar de fijar como norma un espectáculo taurino al año por municipio, se dejaba la puerta abierta a celebrar hasta un máximo de dos. Todo ello, bajo el criterio del delegado del Gobierno a la zona.

Desde los colectivos animalistas consideran que este planteamiento es una "barra libre encubierta" para los correbous. Aïda Gascón, directora de AnimaNaturalis, cree que "se abre la veda porque no se concretan los requisitos para acreditar la tradicionalidad". Por eso, trabajan en unas alegaciones buscando referentes objetivos: "En Navarra se exigen cuatro años seguidos con permisos de un ayuntamiento porque un acontecimiento sea considerado tradicional".

Críticas al 'juez único'


ICV fija su postura en una línea muy similar. La diputada tarraconense Hortènsia Grau dice: "La idea de tradicionalidad con que trabaja el Gobierno es muy amplia y generosa. A la práctica, es una barra libre". Según Grau, "están proliferando las peticiones de permiso en lugares donde hace 40 años que no se celebra ningún correbou". El otro tema que preocupa es lo del juez único , en la figura del delegado del Gobierno: "Hacen falta criterios objetivos y no dejarlo todo en su punto de vista subjetivo de una persona, porque la presión popular hará que sea generoso y que no se enfrente a la voluntad popular", explica Grado

La valoración que hacen los partidarios de estas celebraciones es muy diferente. Miquel Ferré, presidente de la Asociación de Peñas y Agrupaciones Taurinas, opina: "Es justo que pueblos como Sant Carles de la Ràpita, donde hace 40 años que no hemos hecho ninguno, podamos volver". Ferré niega que el reglamento suponga la barra libre porque "hay pueblos que ni han hecho hasta ahora ni harán nunca porque no tienen querencia".

PP y ERC, por la libertad absoluta


En cuanto a los partidos políticos, además de la postura en contra de los correbous que mantiene ICV, tanto el PP cómo ERC se muestran a favor de la libertad absoluta para los correbous. Rafa Luna, diputado del PP, argumenta: "Estamos de acuerdo con cualquier normativa que preserve la existencia de los correbous, igual que defendíamos las corridas. Se tiene que dar libertad a los municipios y tiene que ser el ayuntamiento y no el Gobierno quien tiene que decidir si se hacen correbous o no. Incluso se podría estudiar si los que no han hecho nunca tienen que poder hacer". Gervasi Aspa, máximo responsable de ERC a las Tierras del Ebro, opina: "Si los municipios quieren hacer correbous con motivo de una fiesta, tienen que poder hacerlo igual que organizan conciertos o acontecimientos deportivos, eso sí, tiene que ser una actividad regulada y en que se vele porque el toro no sufra".

Por su parte, Núria Ventura, diputada del PSC, considera que "no aporta nada de nuevo al marco general que dibuja la ley, pero hacen falta más criterios documentales para demostrar la tradicionalidad, no se puede dejar todo al juicio discrecional del delegado del Gobierno". Desde Ciutadans, Jordi Cañas, a pesar de estar de acuerdo que se permitan los correbous, cree que "ahora mismo no es oportuno ampliar los supuestos" y denuncia que "el Gobierno peca de hipocresía cuando utiliza la tradición para permitir el sufrimiento de los animales, que fue el argumento con que se prohibieron las corridas". El reglamento para los correbous se puede aprobar por decreto del Gobierno, pero se tendrá que someter a exposición pública después de su publicación al DOGC, cuando se abrirá un plazo para presentar alegaciones.

Fuente: Diari Ara 

AnimaNaturalis lucha por la abolición de los correbous desde 2010


Desde 2010, AnimaNaturalis ha participado en manifestaciones y protestas contra los correbous. 
Las campañas más actuales se están llevando a cabo a través de recogidas de firmas y de denuncias por las infracciones cometidas en varios festejos en las Tierras del Ebro durante la pasada temporada en 2011.

 

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