Ritual que anula la razón

¿Qué ocurre en la psique humana cuando uno percibe este tipo de espectáculos? ¿Qué sucede cuando ve cómo matan a un toro?

01 junio 2008
España.

¿Qué ocurre en la psique humana cuando uno percibe este tipo de espectáculos, cuando es perseguido por un becerro, cuando ve como ejecutan a un toro?

Todo se encuentra dentro de un proceso de ritualización, un proceso en el que mediante diferentes estímulos se consigue que primen las partes más primitivas del cerebro, y en donde la razón y la lógica, nuestro cerebro más evolucionado, ceden ante a la selva instintiva.

“El ritual incide en la parte del sistema nervioso más animal, relacionado con el sistema límbico. Estos rituales estarían creados para no pensar. Mientras tienen lugar, el cerebro se halla hiperactivado, ya sea por la sangre, el peligro físico, el sacrificio, la música o las drogas (como el alcohol). Entonces deja de intervenir la parte del córtex cerebral, relacionada con la razón y la ética”, explica Luis Muiño, psicoterapeuta. Se deja de sentir empatía, la capacidad de ponerse en la piel del otro.

“No es necesario que uno sea violento o que no tenga un código ético. Cualquier persona en esas circunstancias haría lo mismo”, explica. Según Muiño no existe mucha diferencia en la hiperactivación que se produce en estos ritos, y en los utilizados en las guerras y religiones, y hasta en el exótico vudú. Los procesos de inmersión en rituales de estas características logran que se merme la escala de valores.

En cuanto a la pregunta de si estos espectáculos pueden contagiar de violencia a los menores, Muiño afirma que no. “Lo que puede pasar es que vuelvan adictos, que sólo disfruten con la adrenalina, pero es algo común en nuestros días. Nadie se vuelve violento por ver estos espectáculos. Una vez salen del ritual vuelven a ser los mismos”, dice. Y advierte, las reacciones furibundas contrarias a estos festejos pueden también provenir de esta hiperactivación y apelación al sistema límbico.

Necesitamos tu apoyo

AnimaNaturalis existe porque miles de millones de animales sufren en manos humanas. Porque esos animales necesitan soluciones. Porque merecen que alguien alce la voz por ellos. Porque los animales necesitan cambios. Porque en AnimaNaturalis queremos construir un mundo más justo para todos.

Las donaciones puntuales y periódicas de nuestros socios y socias son la principal fuente de nuestros fondos.