El Lago de Texcoco (Nabor Carrillo) representa un cuerpo de agua de 1,000 hectáreas, en el cual, a pesar de la contaminación, confluyen decenas de miles de aves migratorias y residentes. La operación de un aeropuerto en la zona implicaría la desecación del lago, pues numerosos estudios advierten los riesgos de colisión entre aves y aviones. Diferentes funcionarios y especialistas han advertido de que tal desecación ya está llevándose a cabo e incluso han mostrado evidencias.
Texcoco es considerado una Área de Importancia para la Conservación de las Aves, y el Lago de Texcoco es la zona más importante del centro de la región. Se han registrado por lo menos 8 especies de aves endémicas, y el ‘chorlo nevado’, ave playera amenazada en México y a nivel global, y que encuentra su principal sitio de anidación en la región, ha sido desplazado recientemente por las obras del NAICM. De las 338 especies de registradas en Texcoco, 175 se concentran en la zona del lago y 37 están considerada bajo algún tipo de riesgo de extinción. De secar el lago, 150,000 aves se verían amenazadas y se condenaría a por lo menos 4 especies a la extinción, teniendo incidencia en las diferentes cadenas tróficas.
La avifauna de la región tiene como factores de amenaza a la construcción y operación del NAICM (Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México); a la contaminación y desecación de cuerpos de agua; al crecimiento de la mancha urbana y la agricultura; a los rellenos sanitarios, la tala clandestina, la cacería y la fauna feral; a los incendios forestales, la minería y la generación de desechos de esta misma.
La extracción de materiales para la obra del NAICM ha implicado la desaparición de 100 cerros, en los cuales habitaban mamíferos, aves y reptiles. Los daños sobre estos animales van desde el desplazamiento forzado de su hábitat y el envenenamiento de su entorno por lodos tóxicos, hasta la muerte de los mismos.
A finales de octubre se llevará a cabo una consulta ciudadana para decidir el futuro del NAICM. De continuarse la obra, se afectaría dramáticamente a una de las principales áreas ecológicas de la cuenca del Valle de México, lo cual traería terribles costos ambientales, sociales y económicos.
Desde AnimaNaturalis Internacional nos oponemos al NAICM y a todo megaproyecto que destruya, amenace o desplace a los animales de sus hábitats y sitios de anidación o invernación.
Agradecemos al biólogo Anuar López, al Dr. Fernando Córdova Tapia, a la Dra. Patricia Escalante (Instituto de Biología de la UNAM) y a los diferentes especialistas por compartirnos información.
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