En abril de 2021 salió a la luz un vídeo que mostraba la terrible realidad que sufrían los animales de uno de los muchos laboratorios de experimentación de España, Vivotecnia, con sede en Madrid. Inmediatamente desde el departamento legal de FAADA, en colaboración con Animanaturalis, decidimos denunciar los hechos tanto por la vía penal como por la administrativa.
Finalmente, el pasado 22 de diciembre desde las entidades presentamos el escrito de acusación contra los trabajadores que llevaron a cabo esos actos, así como contra la propia mercantil que permitió, presuntamente, que se diera esa situación en sus instalaciones de manera sistemática, sin hacer nada para remediarlo.
¿Por qué ha transcurrido tanto tiempo hasta la presentación del escrito de acusación? La fase de instrucción de los casos penales es un proceso lento, que, unido al colapso de los tribunales, provoca que los casos se dilaten excesivamente en el tiempo. En este asunto, además, se han practicado numerosas diligencias de prueba.
El trato que los animales recibían continuamente en el laboratorio de Vivotecnia incluía desde prácticas de vivisección, golpes, zarandeos, introducción de agujas en los ojos y conductas similares sin sedación alguna. Además de ser absolutamente innecesarias, estas venían acompañadas de insultos, vejaciones y burlas constantes hacia los mismos animales, dilatando así innecesariamente su sufrimiento. En definitiva, dichos actos excedían, sin lugar a dudas, los procedimientos permitidos por la normativa aplicable a los animales utilizados en experimentación y otros fines científicos, incluyendo la docencia.
En el escrito de acusación hemos pedido la máxima pena para los responsables, solicitando que se condene a los acusados a un año de prisión además de la inhabilitación para el ejercicio de profesión, oficio o comercio relacionado con animales, así como para su tenencia, durante 3 años, por la comisión de un delito continuado de maltrato animal tipificado en el artículo 337 del Código Penal.
Por otro lado, uno de los perros Beagle que aparecía siendo maltratado en las imágenes, fue decomisado provisionalmente y actualmente se encuentra a cargo de una protectora. Por ello, hemos pedido que el decomiso sea definitivo y que el responsable de su maltrato sea condenado por un delito de maltrato animal e indemnice en concepto de responsabilidad civil a la protectora que está velando por su bienestar, por todos los gastos derivados de su atención veterinaria y su manutención.
Paralelamente al procedimiento penal, presentamos una denuncia administrativa con el objetivo de que se incoara un expediente sancionador a los responsables. Ahora, el Defensor del Pueblo se ha pronunciado ratificando el derecho de la entidad a acceder a toda la información del expediente sancionador y requiriendo al departamento competente de la comunidad de Madrid para que de traslado de las actuaciones.
Tal y como indica Anna Estarán, abogada de FAADA: “Desde las entidades garantizamos que no dejaremos de trabajar para conseguir que este escandaloso caso de maltrato no quede impune y para evitar que se vuelvan a repetir hechos como este.”
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